Gonzalo Padró: “Para continuar en el club debo solucionar un proyecto que tengo en Argentina”

Gonzalo Padró (Córdoba, Argentina, 1983) entró por la puerta grande en la historia del Pasek Belenos RC al conseguir la primera permanencia del club en División de Honor B, además de forma holgada. El ‘Buitre‘, internacional y curtido en mil batallas como jugador, se estrenó como técnico para comandar un proyecto que no era sencillo: preparar para una competición prácticamente profesional a una plantilla confeccionada en tiempo récord y con mayoría de jugadores acostumbrados al ritmo de la Liga Norte. Cumplió con creces el objetivo y ahora, desde Ibiza, donde reside con su hermana, analiza una temporada “muy positiva en todos los sentidos”.

Aunque la conclusión abrupta del curso no fue plato de buen gusto para nadie, lo cierto es que la temporada ha sido histórica.

Totalmente. Fue mucho mejor de lo que esperaba cuando llegué al club. Tuvimos apenas una semana de preparación antes del primer partido y pensaba que iba a ser todo mucho más duro. Al final fue duro, pero las cosas salieron bien.

¿Cuál fue la clave del gran rendimiento de la plantilla?

Sin duda que los chicos dieron el cien por cien, ninguno se guardó nada. Recuerdo como chicos lesionados se presentaron a los partidos y no abandonaron en ningún momento. Tuvimos una plantilla corta y el sacrificio del grupo fue la clave del éxito.

Tanto que se estuvo a punto de luchar por los puestos más altos de la tabla, algo impensable en agosto.

Sí, yo creo que si no hubiéramos tenido las cuatro sanciones que sufrimos en la segunda vuelta podríamos haber llegado tranquilamente al tercer puesto. Sinceramente no veía el nivel de Ourense tan lejos del nuestro. Pero bueno, pasó lo que pasó y nos perjudicó, pero creo que debemos quedarnos con que hicimos un buen trabajo y nos quedamos muy cerca del top3.

Fue tu primera experiencia como entrenador. ¿Qué valoración haces?

Muy buena, primero que nada porque terminamos por encima de lo que nos había pedido la dirigencia del club. Estoy orgulloso de haberle cumplido al club que me llamó y que confió en mí. Para mí ha sido una satisfacción.

Aun así, también te convertiste en una figura importante dentro del terreno de juego.

Intenté ayudar al grupo desde dentro. Venía más para entrenar que para jugar, pero al final me tocó jugar casi todos los partidos. Es importante unir juventud y experiencia y traté de aportar tranquilidad a los chicos y aprovechar factores como las touches. Ser jugador-entrenador tiene sus pros y sus contras e intenté aprovechar lo primero.

¿Qué tal fue la adaptación al club y a la ciudad?

Bueno, la verdad es que el contraste fue grande con respecto a Sevilla, que fue de donde yo venía y es una de mis ciudades favoritas, pero poco a poco me fui adaptando y me sentí a gusto. Los clubes no tenían nada que ver. Venía de ascender a División de Honor con un equipo prácticamente profesional y llegué para dirigir una plantilla nueva, con mucha gente que venía de regional. Pero la implicación de todos fue muy buena y al final todo fue bien. ¿Avilés? El clima me costó un poco al principio, pero tiene cosas lindas y la gente me trató muy bien desde el primer momento.

Por último, la pregunta del millón. ¿Seguirá Gonzalo Padró en el Pasek Belenos la próxima temporada?

Me junté con Felipe -Blanco- antes de venirme a Ibiza y le pedí un tiempo, hasta julio, para solucionar un proyecto que tengo en Argentina. Si lo logro solucionar, estaré encantado de seguir como ya le dije a Felipe.