Gabel: “El Belenos que me he encontrado es mejor que el que dejé hace dos años”
Gabel López Blanco (Avilés, 1979) es una institución dentro del Belenos Rugby Club. Fundador, jugador, entrenador, directivo… ha sido de todo dentro de la entidad y a sus 38 no ha perdido ni un ápice de la ilusión por el rugby. Tras dos años en Almería por motivos de trabajo en los que llegó a jugar de nuevo en División de Honor B, el experimentado jugador se recupera de un accidente laboral para ayudar a sus compañeros a "luchar por el ascenso". Es Gabel, un competidor nato que lleva el Belenos por bandera allá donde va.
– Lo primero, ¿cómo estás de la lesión?
– Bueno, el dedo está mejor, aunque estoy pendiente de una reunión con el cirujano el martes. Tengo una herida que no acaba de cerrar e igual me tienen que sacar algún trozo de hueso que se haya quedado po ahí suelto. Si todo va bien podría empezar a entrenar dentro de poco, pero depende del martes.
– Una pena, teniendo en cuenta que se produjo nada más regresar a tu club tras dos años en Almería.
– Pues sí, una buena faena. Llegué a Avilés, entré bien en el trabajo, tengo para tiempo por aquí, jugué un amistoso en pretemporada… pero todo se ha torcido, así que por el momento sólo me queda dar ánimos a los chavales y apoyarles en lo que pueda.
– Allí llegaste a jugar en División de Honor B de nuevo…
– Sí, la verdad es que no me lo esperaba pero así fue. Primero estuve trabajando en un pueblo que se llama Carboneras, y allí jugué en un equipo regional con otras dos personas que habían jugado conmigo en el Belenos, Pelayo y Tito. Nos lo pasamos muy bien y destacamos bastante. Entonces, el año pasado me llamó el Almería, de División de Honor B, y aunque me hizo mucha ilusión al principio y comencé muy bien los primeros partidos después se hizo durísimo y tuve que parar un tiempo. Me cambiaron el turno en el trabajo y se hacía muy complicado compaginar los entrenamientos con el trabajo. Muchas veces tenía que ir a trabajar a Madrid los sábados e ir directo a los partidos los domingos sin descansar. Al final la edad se nota y el cuerpo se resiente.
– Has conocido todas las etapas del Belenos. ¿Cómo ves al Oxigar este año?
– Bueno, estamos bien, aunque todavía no hemos llegado al punto que queremos. Quizá porque hasta ahora hemos tenido partidos asequibles, pero lo cierto es que, aunque los jugadores están bien físicamente, todavía no tenemos el ritmo que queremos, faltan flecos. Aun así, el objetivo es estar muy bien para el 'play off' y a veces si empiezas muy bien luego te desinflas. Es mejor ir de menos a más.
– ¿Qué tal con Jordi Sánchez?
– Estamos en noviembre, pero para mí ya ha hecho la temporada. Es muy particular, pero todavía estuve hablando con él hace poco y creo que está haciendo un trabajo estupendo. Es un motivador, siempre tiene a treinta jugadores entrenando, que eso te llevaa hacer unos entrenamientos fantásticos en los que puedes montar dos equipos, está haciendo las cosas muy bien con las categorías inferiores y también captando nuevos niños y niñas en los colegios. Lo veo muy entregado y eso es fundamental.
– Este año no estás entrenando a las categorías inferiores como en etapas anteriores. ¿Se plantea volver?
– Yo siempre estoy dispuesto a ayudar al club en lo que haga falta. Cuando llegué, por mi horario de trabajo no podía entrenar a ningún equipo, solo al sub18, y ahí ya estaban Felipe y otros monitores. Cuando puedo siempre me paso para echar una mano, pero la verdad es que da gusto ver la cantidad de gente que colabora hoy en día con el club. Es a lo que aspirábamos cuando se fundó.
– ¿Notas mucha diferencia con el Belenos que dejaste hace dos años?
– Parece que el rugby está de moda y eso se nota. La captación funciona, la visita de los All Blacks a Asturias nos ha venido muy bien, la creación del campo de rugby de La Toba, que es una pasada y es mucho más cómodo tanto par los jugadores como para los padres, la colaboración de gente como Cuyi, Lalo o Tintín en los entrenamientos… el Belenos sigue creciendo y es un orgullo, pero tenemos que seguir. Todavía podemos traer mucha más gente a la escuela.
– Hay que potenciar la asistencia del público a los partidos del primer equipo, ¿verdad?
– Sí, pero bueno, es normal que haya menos que hace unos años. Antes competíamos en División de Honor B o Primera Nacional y los partidos eran más igualados, había más nivel, jugadas más espectaculares… Este año, por ejemplo, es normal que a la gente le atraiga menos ver un partido de 140-0. Yo pienso que según avance la competición irá viniendo más gente porque habrá más en juego. Al final, cuando al equipo le hace falta apoyo, la gente responde.
– Una buena piedra de toque será este sábado el Cowper…
– Sí, junto al Gijón es nuestro principal rival para la liga y eso un partido de esos que te dicen cómo estás. Espero que venga mucha gente al campo y que anime a los chavales, que deberán hacer un buen partido. Si queremos ganar la liga y llegar bien al 'play off' tenemos que ganar partidos como estos.
– ¿Cuánto rugby le queda a Gabel?
– Hombre, yo quiero jugar hasta que pueda, pero por ejemplo en División de Honor B veo difícil volver a hacerlo. Ahora mismo, con mis nuevos horarios, tengo solo dos días para ir al gimnasio y eso significaría llegar a casa todos los días a las 22.30 horas. Se puede hacer, pero requiere muchísimo esfuerzo y estas competiciones cada vez son más competitivas, con muchos fichajes y gente joven que empieza a jugar al rugby muy joven. De todas formas, creo que en temporadas como esta todavía puedo aportar cosas y echar una mano. Aunque no tenga la calidad de muchos de los jóvenes, gente veterana como yo lo que hacemos es poner ese corazón, ese orgullo que a veces falta. Cuando los chavales en partidos duros se bloquean, no saben sacar el rugby que tienen dentro, esa aportación que damos nosotros es importante. Una buena mezcla que creo es interesante. Lo que sí tengo claro es que jugaré siempre que pueda ser competitivo y pueda intentar quitar el puesto a alguien o que me lo quiten a mí. Para no competir, prefiero ir al gimnasio o ir a correr por ahí.